Juan
Cánovas Orcajada
José
Riquelme Marín
Cuenta la tradición oral que junto a la ribera del rio, entre el puente
de las Pilas y la Rueda, apareció en tiempo inmemorial la imagen de una Virgen
Niña de pequeña talla, por ello le llamaron Virgen de la Presentación o también
Virgen Pequeña.
Los vecinos
cristianos de la vieja Alcantarilla, situada entre el rio Segura y la acequia
de Barreras, levantaron una ermita para honrar la imagen, a la que proclamaron
como Patrona, y que funcionó desde el siglo XIII como templo parroquial para
darle culto, que continuaría durante los siglos venideros.
La riada de
1545, la de San Lucas en aquel octubre luctuoso que tantos estragos ocasionó a
todos los pueblos de las vegas media y baja del rio Segura, fue lo que dio
lugar al traslado unos meses más tarde, desde las cercanías del río en donde
estaba situado el poblado, al lugar donde ahora está ubicada nuestra villa.
En el sitio del
desastre quedó la ermita que hacía las funciones de pequeña parroquia. Se
recompuso lo deteriorado y se mantuvo con el culto a Nuestra Señora de la
Presentación. Debió ser por aquel tiempo cuando, como consecuencia directa de
las riadas, se produjeron epidemias que causaron gran mortandad en la región, y
los habitantes de la aldea, acudiendo al favor divino se encomendaron a la
Virgen, y la tradición nos dice que la Virgen hizo el milagro de atajar la
epidemia. Por lo que se cree que, agradecidos con Ella, le cambiaron el nombre,
llamándola a partir de ese momento Nuestra Señora de la Salud, manteniendo el
culto en su ermita hasta la venida de los Mínimos que cuidaron de ella desde
1704. Por eso, en nuestro local y pequeño mundo cristiano, deberíamos convenir
que Alcantarilla tuvo su primera iglesia en la Ermita de la Salud, y antes de la
construcción de la iglesia de San Sebastián.
Como documento a
consultar, podemos contemplar en el plano más antiguo que se conoce de
Alcantarilla, el de 1728, la existencia con el nombre de “Conbento de la
salud”, ubicado en las proximidades del rio. Cuando se instalan los frailes, la
ermita era un edificio aislado de factura austera, con una torre-campanario y
remate almenado; era el elemento vertical del conjunto para atraer a los
fieles. En mayo de 1704, el Concejo comunica a los Padres Mínimos que, de parte
del Obispo les ha sido cedida a la dicha
religión y provincia, la ermita de Nuestra Señora de la Salud, que está en el
término de esta villa, para que por
el dicho tiempo la tengan y gocen y posean como casa propia, cuidando los
dichos del mayor culto y veneración a la Santa Imagen de Nuestra Señora, para
cuya devoción y la del Glorioso San Francisco de Paula da Su Señoría
Ilustrísima la referida licencia y ermita, todo ello sin perjuicio del derecho
parroquial.
Detalle del
plano del año 1728 en el que aparece reflejado el “Convento de la Salud”
Gracias a las
donaciones del Cardenal Belluga y otros, consiguieron los medios necesarios
para construir y mantener su propio Convento dedicado a San Francisco de Paula,
y el nuevo Hospicio.
Iglesia
del Convento de los Padres Mínimos
A partir de los
años 1721-1722, el Concejo decide que, puesto que la ermita se encuentra en
estado ruinoso, la imagen de la Virgen de la Salud sea llevada con los frailes
Mínimos al convento para que la custodien y den culto llevándolo a efecto desde
ese día, hasta el 10 de enero de 1804,
que ceden en patronazgo la Capilla de “Nuestra Señora de la Presentación, con
título de la Salud, a favor de Don Joseph del Castillo y Tovar (a la sazón
alcalde de la villa) y de toda su familia y sucesores”.
Fachada del
convento de los Padres Mínimos hacia el año 1959.
Archivo
Histórico Municipal. Fotografía cedida por Matías Ramón Sánchez Manzanares
En 1936, el convento fue robado y saqueado sus
imágenes, así como los efectos de culto y cuadros de gran valor…
Antonio Domingo
Manzano “el manco”, apenas acabada la contienda civil se puso manos a la obra, haciendo
resurgir nuevamente la “Hermandad de las Flores de la Virgen de la Salud”. Realizó
una colecta, casa por casa y por suscripción popular. Con una fotografía de la
imagen de la Virgen destruida, se presentó en el taller del escultor Nicolás
Martínez Ramón para erigir la nueva talla.
Imagen antigua
de la Virgen de la Salud, años 30, en su camarín del convento
y que fue
destruida en el año 1936. Colección particular de José Antonio Caride
de Liñán.
Archivo Histórico Municipal
La nueva imagen
estaba en el Convento de San Francisco, donde Frasquita, junto con Mercedes la
“Rondela”, la limpiaban todas las semanas, ponían flores y cambiaban el
vestuario cuando era menester, cosa que sólo podía ser realizada por mujeres, y
no más de dos.
Iglesia
Parroquial de San Pedro Apóstol
El año 1967, en
una visita pastoral a la villa, el entonces obispo de la diócesis Don Ramón
Sanahuja y Marcé visitó la Iglesia del Convento de los Mínimos, y reparó en la
imagen de la Virgen de la Salud, que presidia el altar mayor. Al enterarse de
que era la Patrona de Alcantarilla, y dado el estado de relativo abandono y la
ausencia de culto regular en la Iglesia, sugirió que quizás sería conveniente
trasladar la imagen al templo parroquial. Recogida la sugerencia por el párroco
Don Diego Hellín Zaragoza, la imagen se trasladó a la Parroquia de San Pedro
Apóstol, donde quedó instalada hasta el día de hoy.
Iglesia de San
Pedro Apóstol (Foto J. Cánovas)
La actual Hermandad
de la Virgen de la Salud se funda en 1973, siendo su primer presidente el
médico Don José Capel Ortíz, secretario Fulgencio Sánchez Riquelme, y párroco
de San Pedro Apóstol el Rvdo. Don José García Martínez. El camarero fue Antonio
Domingo Manzano “el manco”, cargo que ocuparía de forma vitalicia hasta su
muerte, y camarera doña Reyes Carreño de Menárguez. Presidente de Honor el
Alcalde de Alcantarilla y sus sucesores en el cargo.
Capilla de la
Virgen de la Salud en el templo de San Pedro Apóstol (Foto J. Cánovas)
La
nueva ermita
La nostalgia de
las raíces ancestrales llevó a los alcantarilleros a plantearse la recuperación
de la ermita a la “Virgen Niña” en un lugar cercana a su antiguo emplazamiento.
En el paraje del “Agua Salada”, a escasos metros del río Segura, a iniciativa
de la “Hermandad de las Flores”, y con el apoyo del alcalde Don Fulgencio Pérez
Artero, en el año 1973 se inicia las gestiones para la construcción de una pequeña
ermita.
El Alcalde de
Alcantarilla, adquirió para el Ayuntamiento una parcela de 1.363 metros en el
Rincón de la Rueda, con destino a la construcción de la ermita para la Patrona
de nuestra villa, la Virgen de la Salud. El terreno era propiedad de Don José
Cascales Alemán, y ajustaron el precio en 185.355,- pesetas.
Replanteo de la
nueva ermita de la Virgen de la Salud
La primera
piedra de la ermita se colocó el día 5 de febrero de 1973. Asistieron, además
de las autoridades locales, el Ilmo. Sr. Alcalde de Murcia Don Clemente García
García, y el cura párroco de la Iglesia de San Pedro Apóstol Don José García
Martínez. Esa primera piedra colocada era un capitel que formaba parte de la
puerta que daba a la Calle Mayor, de la
derribada Iglesia de San Pedro. Se enterró en el lugar donde se situaría el
Altar Mayor de la ermita.
Colocación de la
primera piedra de la ermita. Colección de
Pilar Cano
Vicente. Archivo Histórico Municipal
Las
obras comenzaron el día 12 del mismo mes, bajo la dirección del maestro de
obras Francisco Sandoval Almagro “Paco al Gato”, que contó con los albañiles
Blas Sánchez Tormos, Ginés Sandoval Almagro, Francisco Marín Chumillas “el
Pote”, Antonio Mengual Rubio “el Le”, Daniel Molina, y Juan Marín Sánchez. El
arquitecto fue D. Demetrio Ortuño Yáñez y el aparejador D. Pedro Ortuño Yáñez.
Una parte del terreno adquirido por
el Ayuntamiento estaba arrendado a Don Pedro Sáez Guirao, que en dicho lugar
tenía plantaciones de patatas. El concejo, con fecha 3 de marzo de 1973
indemnizó al citado para que dejara la finca de forma definitiva, ya que era
terreno anejo a la ermita que ya se estaba construyendo.
Altar de la
ermita. Los cuadros son todos ellos obra del pintor alcantarillero
Ángel Naranjo,
del año 1974 (Foto J. Cánovas)
La
puerta de la calle procede de un derribo de un edificio en Murcia, frente a la
Iglesia de San Bartolomé. Las dos puertas interiores pertenecían a una casa de
la calle Mayor, propiedad de Eulogio Velasco, que tenía un cine de verano. La
baranda del púlpito procede de la farmacia que tenía D. José María López Leal
en la calle Mayor, llamada “de las escaleras”, y que fue derribada para
reformar el Casino. Las vidrieras son de la empresa Unanue, de San Sebastián.
La campana fue un regalo del almirante Yusti Pita, con una inscripción que
dice: “La zona marítima del Mediterráneo al pueblo de Alcantarilla”, y procede
de un barco llamado “City of Bedford”. El campanario fue diseñado por el pintor
alcantarillero Angel Martínez. Las rejas de las ventanas y las dos lámparas
fueron forjadas por el herrero de esta villa Alonso Carrillo, en la plaza de
Jara Carrillo. Los bancos de piedra y el reloj de sol fueron labrados por el
cantero Alfonso Cánovas, y la piedra procedía del derribo de la iglesia de San
Pedro. El trabajo de carpintería fue realizado por el carpintero José Sánchez
Pérez “Pepe el Cabo”, en el taller de Roque Lorente “Maestro Roque”. La cruz de
hierro del campanario fue donada por D. Fulgencio Pérez Artero, habiendo estado
expuesta en el escaparate de este señor durante el concurso de cruces de mayo
de 1972. La pintura del techo, paredes y puertas la llevó a cabo el pintor de
esta villa José López Ardid “Pepe el Chano”. El cáliz fue donado por D. Vicente
López Herrera junto con otros varios objetos.
La ermita fue
bendecida el día 6 de octubre de 1973, a las 6 de la tarde, por el Rvdo. Don
José García Martínez, cura párroco de San Pedro Apóstol. La primera boda se
llevó a cabo el día 8 de octubre de 1973, a las 12 de la mañana, oficiada por
el Rvdo. Don Jesús Tormos Alarcón.
Romería de la
Virgen de la Salud. Pintura de Fulgencio Saura Mira (Foto J. Cánovas)
En sesión del 31
de octubre de 1973, por la alcaldía se informa: que la ferviente devoción popular reinante en nuestro pueblo por la
Virgen de la Salud, Patrona y Alcaldesa Honoraria de Alcantarilla, incrementada
por los festejos que en su honor se han venido celebrando en los últimos años,
impulsaron a esta alcaldía a la construcción de una ermita consagrada a tan
Augusta Señora, y promovida por la misma, se han ejecutado las obras para la
construcción de una capilla en el paraje del Agua Salá, muy próximo a donde
cuenta la tradición apareció la venerada imagen y existió un eremitorio como lo
atestiguan antiguos mapas de la población, igualmente dedicado a esta
advocación de la Santísima Virgen.
A esta finalidad se han recibido innumerables apoyos
económicos de amigos, estamentos y del municipio, que cristalizaron en esta
realización, que ha pasado a ser del patrimonio del Ayuntamiento y en un lugar
más de esparcimiento de la población, como de devoción mariana.
Bendecido recientemente, se aguarda que con la
presencia del Excmo. Sr. Gobernador sea
inaugurado oficialmente en fecha próxima.
De todo ello tiene esta alcaldía el honor de
informar a la corporación, la que en todo momento ha estado identificada y
plenamente vinculada a esta obra de índole espiritual, que demuestra la
religiosidad de nuestro pueblo y su adhesión a la Santísima Virgen.
Pintura de
Pascual Ayala, pintor local, en 1982. El púlpito está realizado con
la barandilla de
las escaleras de la botica del mismo nombre, junto al Casino, propiedad
de Don José
María López Leal (Foto J. Cánovas)
El 22 de marzo
de 1974, Don José Capel Ortíz, Hermano Mayor de la hermandad de Nuestra Señora
de la Salud, con estatutos aprobados por el obispado con fecha 9 del mismo mes,
solicita formalmente al ayuntamiento el
uso y administración de la ermita por tiempo ilimitado, para los actos propios
del culto y de los fines de la Hermandad.
El alcalde,
previo informe de secretaría, extiende el día 8 de abril de 1974 el certificado
de cesión y uso, sin carácter exclusivo, dada la categoría de bien de dominio
público que posee la misma. Se procede también a realizar un inventario de los
objetos que la ermita posee, para constancia en el ayuntamiento. El citado
certificado está firmado por el alcalde Don Fulgencio Pérez Artero, y por el
secretario Don Fulgencio Saura Mira.
Instancia de D.
José Capel Ortiz y certificados municipales sobre el uso
y administración
de la ermita de Nuestra Señora de la Salud
La
ermita está pensada desde su concepción para dar culto a nuestra patrona,
principalmente en las romerías del mes de mayo, cuando se celebran las fiestas
patronales, y las fiestas populares en enero a San Antón. Una vez finalizado el
periodo festivo, la ermita queda de nuevo sola. La imagen de la Virgen, por
motivos de seguridad entre otros, no se alberga en la ermita, sino en la
parroquia de San Pedro Apóstol desde el año 1967. Desde aquí es donde Nuestra
Señora sigue siendo fuente de salud y prosperidad para nuestro pueblo desde
siglos.
Misa vespertina,
mayo de 2015 (Foto J. Cánovas)
Bibliografía
Diego Riquelme Rodríguez, Revista
Murgetana nº 106, año 2002
María Rosa Gil Almela, Revista Ntra.
Sra. Virgen de la Salud 2007
María Rosa Gil Almela, Revista Ntra.
Sra. Virgen de la Salud 2013
Fulgencio Izquierdo Ortuño, La Virgen de
la Salud Patrona de Alcantarilla, 2005
Hermanas Domingo López, Revista Ntra.
Sra. Virgen de la Salud 2014
Fulgencio Sánchez Riquelme, Revista Ntra.
Sra. Virgen de la Salud 2016
Archivo Ilmo. Ayuntamiento de
Alcantarilla
Archivo Municipal de Murcia, El Almudí
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